Ayer, antes de reunirse con sendos dirigentes del PRO, Mauricio Macri manifestaba ante la prensa que la Libertad Avanza quería imponer una posición dominante de cara a una posible unión en las elecciones legislativas en CABA. Su apreciación fue precisa, aunque a la postre su queja no tuvo mucho efecto en términos concretos: el partido de Javier Milei le dejó el 5° y 6° puesto solo en Diputados.
El acuerdo se concretó tras una negociación exprés que encabezaron Karina Milei y Mauricio Macri. Por los trascendidos que circularon hasta el momento, el PRO cedió de tal forma que más que consenso lo que sucedió fue más parecido a una derrota. Más aún, se habla de que siquiera el nombre el partido fundado por el ex presidente figurará en la boleta. Consecuentemente, dominará el color violeta en la boleta, característico de LLA.
Asimismo, la semana pasada se especulaba que Patricia Bullrich podría ser la candidata a senadora para las elecciones del 26 de octubre, pero en esta dinámica de semejante volumen informativo hay que recordarle a los distraídos u olvidadizos que la actual ministra de Seguridad de la Nación renunció al PRO y se afilió a La Libertad Avanza.
Ergo, todo indica que es una derrota por donde se la mire para el partido que gobierna desde hace casi 18 años en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Evidentemente, el tercer puesto de las elecciones de mayo costó muy caro y el PRO comenzó a pagarlo.