El jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Jorge Macri, elevó su reclamo al Gobierno nacional por una deuda de coparticipación que, según la Ciudad, asciende a $274.000 millones. El mandatario porteño busca asegurar que estos fondos sean incluidos en la previsión de ingresos y gastos de la Nación para el año 2026.
El reclamo al Presupuesto 2026
La principal exigencia de la gestión del PRO es que la deuda figure en el Presupuesto Nacional que será tratado en las próximas sesiones extraordinarias del Congreso.
“Como toda obligación de pagar, tiene que estar en el Presupuesto. Lo he hablado con todos los diputados que integran la Comisión de Presupuesto y es uno de los requerimientos que tenemos”, manifestó Jorge Macri.
La Ciudad denuncia que, desde agosto del corriente año, la Casa Rosada ha comenzado a incumplir el mecanismo de “goteo” diario de recursos que el Ministerio de Economía había acordado para acatar un fallo de la Corte Suprema de Justicia. Este incumplimiento es lo que ha provocado que la deuda global vuelva a crecer hasta la cifra actual.
El origen del conflicto: De 2020 a la Corte Suprema
El conflicto se remonta a septiembre de 2020, cuando el entonces presidente Alberto Fernández decidió recortar fondos de la coparticipación de CABA. Esta medida se tomó para reasignar recursos a la provincia de Buenos Aires, a cargo de Axel Kicillof, en medio de la pandemia y una crisis de seguridad desatada por un levantamiento de la Policía Bonaerense.
Tras el reclamo judicial de la Ciudad, la Corte Suprema de Justicia falló a favor de la gestión porteña, declarando la arbitrariedad de la medida nacional y ordenando la restitución de los fondos retenidos.
- Fallo: La Corte ordenó a la Nación girar a CABA un 1,55% del total de la coparticipación.
- Mecanismo de pago: Se había acordado un sistema de “goteo” diario para regularizar la transferencia de recursos.
La denuncia actual de la Ciudad radica en que este mecanismo diario ha sufrido una “ralentización” a partir de agosto de 2025, volviendo a engrosar la deuda que el Gobierno nacional mantiene con CABA.